Estar desnudo es no portar prendas de vestir o de protección. Se podrán imaginar que no estoy escribiendo hoy para contarles sobre mi experiencia en una playa o ambiente nudista, hablaré sobre la primera vez que me desnudé ante alguien.
Alguna vez pensé que estar desnudo era sólo andar sin ropa. Si ves a la ropa como una prenda de protección, podrías ver la desnudez como estar sin protección alguna. En mis primeros semestres universitarios algún profesor nos dijo en clase que los médicos estamos entre las personas más poderosas del mundo porque ante nosotros las personas se desnudan con una orden y poco cuestionamiento. Confían que por ser médicos les estamos pidiendo que se desnuden para su bien, se los estamos pidiendo para evaluarlos y ayudarles. Lo cual es cierto, sin embargo, creo que pocos médicos contemplan la vulnerabilidad que nos muestran los pacientes ni la comparan con la propia al evidenciar que con una sola orden, alguien a quien apenas conoces está dispuesto a permitir mostrarse indefenso.
Cada quien decide cuál es el mejor momento para desnudarse ante otra persona, que no sea médico, y verá cuáles son sus intenciones con la persona ante quien lo hace. Queda en la persona si esta desnudez es aquella sin prendas de vestir (encuero(1)) o si es la desnudez sin defensa. Para mí la verdadera desnudez es aquella en la que nos mostramos completamente vulnerables ante los demás y esta desnudez no se ve, se escucha.
Son las palabras que escogemos para compartir los hechos que nos han penetrado el alma las que describen nuestra verdadera desnudez. Cuando le permites a otra persona conocer cómo has sido herido, dónde has sido herido, cuántas veces y quién o qué lo hizo le das todas las herramientas para destrozarte y volverte añicos, en pedacitos tan pequeños que ningún ortopeda (2) podrá reconstruir. Al hacerlo, consciente o inconscientemente le has dado poder al confiar que con esta información tomará decisiones para tu bien, así como se lo confiaste a tu médico.
Como personas emocionalmente inteligentes que somos, claramente no solo le vamos a decir a esta persona de interés como destruirnos. No pueden dejar de faltar las conversaciones en las que los caprichos, excentricidades, deseos, personas que admiramos y amamos, junto con todas las cosas que nos gusten queden claras, detalladas e ilustradas. Ahora, cuando todas estas cosas están sobre la mesa, la desnudez ha llegado a su punto máximo, no hay vuelta atrás, y si escuchó y tomó nota de este lado de tu desnudez te demostrará que su interés es genuino.
Algunos con mucha facilidad compartimos ambos tipos de desnudez. Otros necesitamos esperar a que la relación entre en calor para atrevernos a compartir esos detalles. Lastimosamente entrar en calor no siempre nos ayuda a discriminar si esta persona en efecto merece ese poder que le otorgaste con tus palabras. ¿Ven cómo en este aspecto las dos formas de desnudez son iguales?
La primera vez que me desnudé ante un alguien fue un desastre. Resultó ser que esta persona no tenía la capacidad de protegerme ante ese nivel de vulnerabilidad. Ese poder que le di fue en vano y probablemente de manera inconsciente, o eso quiero pensar, se convirtió en todas las cosas que le describí que me lastimaron. Quedó en mí y las personas que abrazo todos los días emparapetar (3) los pedacitos míos que quedaron, y lastimosamente también me quedó la duda si debo desnudarme de nuevo.
Pienso que es indispensable para toda relación proyectada para toda la vida contar con al menos un tipo de desnudez. Y las personas especiales, con quien quieres conectar tu alma, definitivamente deberían conocer ambos tipos de desnudez. ¡Ojalá existiera algún tipo de condón para los sentimientos desnudos! Así no tendrían que reproducirse esas heridas con las personas equivocadas. Pero como no los hemos inventado aún, nos va a tocar practicar la abstinencia hasta que estemos seguros de con quien podemos estar completamente desnudos.
Glosario sarcástico de Jelani:
1. Encuero: mostrar todo el cuero. Término que se refiere a mostrar el cuerpo completamente desnudo, sin prendas de vestir
2. Ortopeda: especialista de la medicina que se enfoca en enfermedades músculo esqueléticas. Es quien te díseña e indica el tratamiento que necesitas por fracturas óseas (huesos rotos/quebrados).
3. Emparapetar: juntar nuevamente tratando de devolver su forma original, puede hacerse con cualquier tipo de pegamento (caray gula, tape, goma en barra, saliva, abrazos)